1. Limpieza impecable
2. Ubicación excelente
3. Personal amable

1. Ruido molesto
2. Desayuno caro
3. Problemas con el servicio

La mejor decisión que he tomado en mi vida

La ubicación es perfecta, frente a la estación de tren. Las habitaciones son cómodas, aunque un poco pequeñas. El desayuno tiene buena variedad, pero su precio es un tanto elevado. En general, una buena opción para una corta estancia, aunque hay pequeñas áreas a mejorar en la limpieza.

El ibis está muy bien ubicado, justo enfrente de la estación de ferrocarril, lo que facilita moverse. La habitación era acogedora y la cama cómoda, ideal para descansar. El personal fue muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. Es un lugar limpio que cumple con lo que se espera de un hotel de esta categoría.

Lo recomiendo encarecidamente.

Todo bien, pero desayuno caro.

Me encantó la limpieza impecable y la comodidad de la habitación, donde la cama era muy acogedora. La decoración, aunque sencilla, era moderna y acogedora, lo que hizo que mi estancia fuera realmente agradable.

Una mayor variedad de opciones vegetarianas en el desayuno.

Estancia agradable pero con algunos detalles que mejorar

El acceso al hotel es complicado, ¡cuida tu conducción! Las habitaciones traseras son muy tranquilas, lo que permite un buen descanso. El desayuno es rico, pero algo costoso. El check-in temprano fue un alivio tras un vuelo largo. Considera reservar directos las habitaciones traseras.

La ubicación es perfecta, justo enfrente de la estación de tren. Buena oportunidad para hacer tours en bicicleta. Las habitaciones son limpias, pero el ruido de la calle puede ser molesto. El desayuno tiene muchas opciones, aunque un poco caro.

La habitación era cómoda y bien insonorizada, lo cual fue agradable. El desayuno tenía una buena variedad, aunque el precio es algo elevado. Sin embargo, noté que la limpieza podría mejorar y las toallas son pequeñas. Ideal para estancias cortas, pero hay áreas que necesitan atención.

La ubicación es excelente, justo al lado de la estación de tren, lo que facilita moverse por la zona. Las habitaciones fueron cómodas y el baño estaba sorprendentemente bien para ser un Ibis. Sin embargo, el aparcamiento es un problema, ya que solo hay opciones cercanas y el desayuno es bastante caro aunque abundante.

ideal para una escapada con buena conexión de transporte

buena ubicación, cómodo desayuno

habitación pequeña

La habitación era súper cómoda y estaba bien insonorizada. La cama era acogedora, así que descansé genial. El baño estaba bastante bien, más de lo que esperaba para un Ibis. Pero un detalle que me molestó fue que las toallas eran un poco pequeñas. En general, estuve a gusto y la limpieza fue buena, pero esos pequeños detalles pueden contar mucho.

Céntrico, cómodo, encantador.

La ubicación es simplemente perfecta, justo enfrente de la estación de tren, lo que hace que moverse sea pan comido. Las habitaciones son tan acogedoras, con camas cómodas que te abrazan al final del día. Y ni hablar del desayuno, delicioso y con un montón de opciones para empezar el día con energía.

recomendado 😊❤️

Las habitaciones en la parte trasera son muy tranquilas, lo que permite un buen descanso. La cama es cómoda, ideal para reponerse después de un día explorando la ciudad.

No hay nevera en las habitaciones, lo que es un poco incómodo si planeas quedarte más de un par de días. Lo mismo pasa con las toallas, que son un poco pequeñas y no hay toallas para las manos. El desayuno cuesta 16 euros, que me parece elevado para lo que ofrecen. La limpieza podría mejorar, ya que solo estiraban las colchas y no limpiaban bien los utensilios que usabas. Además, noté que el sistema de ventilación se apaga en ciertas épocas y las ventanas solo se abren 2 centímetros, lo que puede ser molesto.